Finanzas para independizarte y salir de casa de tus papás
Antes de independizarte, debes saber cuánto y en qué vas a gastar mes con mes”
¿Qué estrategias seguir al momento de dar el paso para independizarnos? En este episodio de “Gimnasio Financiero”, Jimena Camino y Francisco Eguiza nos comparten algunos consejos y nos cuentan sus experiencias al momento de hacerse de sus propias finanzas para sobrevivir
Desde la perspectiva financiera, vivir en casa de los padres puede ser muy cómodo, ahorramos en renta, servicios, comida, por ejemplo. Pero la necesidad de contar con más libertades nos lleva a independizarnos.
Jimena Camino y Francisco Eguiza recomiendan establecer una serie de medidas previas a mudarnos solos.
La primera medida sería una evaluación de la situación económica, de cuánto dinero dispones al mes, si vas compartir gastos con alguien o no, además de revisar en qué gastas.
Jimena aconseja que, ante de irnos de casa, empezar a apoyar en la dinámica familiar con algunos aspectos como pagar parte de la despensa, o hacernos cargo del recibo de luz.
“Te vas acostumbrando a que tu dinero se va en esos gastos de los que más adelante tendrás que hacerte responsable. Además, comenzar a pagar algunas cuentas siempre es una grata sorpresa en el entorno familiar”, comenta.
Francisco señala que es importante saber qué tanto dinero vas a tener disponible cuando te vayas de casa, para empezar a buscar dónde vivir y que cuentes con una renta que no tomé más del 30% de tus ingresos.
“Hay que tener claro que la renta de un departamento es, al menos, por un año. Tú firmas un contrato anual y si te vas antes te cobran una penalización. Además, la renta sube año con año, siempre te van a subir al menos el 5% o el 10% y eso lo tienes que considerar”, indica.
No debes descartar diferentes opciones para que los gastos se reduzcan al momento de rentar un departamento, como es el caso de vivir con roomies, para dividir costos. También puedes alquilar un departamento amueblado, para así desentenderte de adquirir muebles.
Si has encontrado una renta que vaya con tus necesidades, debes ajustar el resto de tus gastos para que no acabes sobreendeudándote con la tarjeta de crédito. Debes saber cuánto gastas en el súper, tus salidas, viajes, gasolina, y considerar cada elemento dentro de tu presupuesto.
Por eso es útil que todo lo que tengas que pagar lo lleves registrado en una librera o nota electrónica. Y no sólo considerar luz, agua, gas, teléfono, renta, también hay que considerar la mudanza, cuyo precio varía según a dónde te muevas y cuántos muebles tienes.
De igual forma, hay que considerar imprevistos, como averías en el departamento, o emergencias de salud.